La piel es nuestra barrera protectora del medio que nos rodea. Nos protege contra el calor, la luz ultravioleta y las infecciones. Además, nos permite comunicarnos con el entorno gracias a los receptores del tacto, la presión, el dolor y la temperatura.
Tenemos que cuidar nuestra piel, y para ello es fundamental un adecuado aporte de nutrientes.
¿Son los ácidos grasos omega-3 beneficiosos para nuestra piel? Parece ser que sí, y cada vez se publican más estudios que avalan la relación entre el consumo de ácidos grasos omega-3 con la salud de la piel.
Como sabemos, la radiación solar ultravioleta tiene efectos nocivos en la piel y debemos protegernos para evitarlos.
Los ácidos grasos de cadena larga omega-3, entre los que se encuentra el DHA, pueden ayudarnos a reducir los efectos causados por la sobreexposición solar. Los omega-3 tiene efecto antiinflamatorio y pueden reducir la reacción inflamatoria que ocurre tras la exposición solar excesiva, caracterizada clínicamente por eritema y edema.
Los ácidos grasos omega-3 ralentizan el fotoenvejecimiento de la piel atribuible a la exposición excesiva a la luz solar. Esto se debe a sus efectos antioxidantes y antinflamatorios, que evitan la degradación del colágeno e incluso pueden incrementar sus síntesis.
El uso conjunto de protectores solares y la ingesta adecuada de ácidos grasos omega-3 incrementa la protección de la piel a la radiación solar ultravioleta.
Además, los omega-3 se han relacionado con la mejora de los síntomas de la dermatitis, una enfermedad cutánea inflamatoria que sufre un elevado porcentaje de la población. Se ha observado que la ingesta de omega-3 mejora el SCORAD (Scoring Atopic Dermatitis), que es la puntuación de la gravedad de la dermatitis atópica.
Recientes investigaciones plantean que el consumo de DHA en personas que sufren eczema atópico puede mejorar su sintomatología. Sin embargo, se necesita investigar más en profundidad para poder afirmarlo.
También se ha estudiado el efecto del omega-3 en personas con acné. Se demostró que la ingesta de ácidos grasos-omega-3 durante 10 semanas reduce las lesiones que provoca el acné, como la inflamación.
En pacientes con psoriasis se ha observado la posibilidad de que al aumentar ligeramente la ingesta dietética de ácidos grasos n-3 mejoren sus síntomas.
Incorporar ácidos grasos omega-3 puede tener efectos beneficiosos en nuestra piel. Un aporte adecuado de estos ácidos grasos hace que nuestra piel sea suave, elástica e hidratada.
Bibliografía
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Elena García-Maldonado
Veggunn
